Escenoteca estrena en Feria de Palma su nuevo espectáculo, bajo el título de ‘Animalitos. Una historia trocha’. Pepa Muriel explica que trochería es un término utilizado en Huelva que hace referencia a decir tonterías sin pies ni cabeza. Una historia trocha es pues una historia tonta.
Mariquilla es una niña hecha de espuma de mar, arena caliente y papas aliñás. Y a veces es feroz, como el lobo de la tos. De pequeña era muy trocha y muy traviesa. Su vecina siempre le decía riéndose a carcajadas que ella era muy mala, más mala que una rata cana “criá” en una chumbera. Y Mariquilla se lo creyó. Cuando nació su hermano pequeño, su madre enfermó y sus padres hicieron un viaje para visitar a un médico muy bueno pero muy caro y que vivía muy lejos. Se llevaron al viaje al hermano pequeño, pero a ella la dejaron en casa con los abuelos. Una madrugada Mariquilla decide escaparse, escondida en un canasto, en busca de sus padres…. Mariquilla de pequeña, no sabía que a pesar de todo ella era buena.
Pepa Muriel se puso al frente de Escenoteca en 2002, con el objetivo de trabajar conjuntamente las Artes Escénicas y la Educación. La necesidad de transformar el teatro en un acto educativo y la educación en puro espectáculo es lo que hizo nacer este proyecto de arte, educación y cultura, en un intento también de alejarse de la didáctica mal entendida, así como en la voluntad de trabajar en nuevas dramaturgias para nuevos públicos.
Esa idea hizo que Escenoteca se plantee de forma transversal sus trabajos y propuestas escénicas, mediante los que recorren y llevan a los niños a la literatura, a la danza, al cine, al arte contemporáneo, a los museos, a la naturaleza y al refuerzo de los lazos intergeneracionales con sus familias: “Creé el proyecto Escenoteca, arte y educación, hace ya muchos años, para ponerle nombre y habitar el espacio que comparte las artes escénicas, la narración oral y la educación. Desde 2002 juego con el arte y la educación… Cuento sobre lo que me emociona”.
