En 2022 se cumplen 400 años del nacimiento de Molière. Para celebrarlo, Atalaya se adentra por vez primera en el universo del dramaturgo francés y lo hace con ‘El avaro’ en clave de musical, siguiendo la estela de dos de sus éxitos anteriores –‘La ópera de 3 centavos’ y ‘Marat/Sade’–, también en este registro.
Las adaptaciones de clásicos y su modernización son “santo y seña” de esta compañía que en 2023 cumplirá 40 años, así lo ha demostrado desde ‘Elektra’ a ‘El Rey Lear’, pasando por ‘La Celestina’ o ‘Divinas palabras’. Le toca ahora el turno a uno de los padres de la comedia francesa, que tanto aportó al desarrollo del teatro y en gran medida a que Francia tuviera renombre en este arte.
Los ocho actores que participan en este festín musical están capitaneados por Carmen Gallardo, en la piel del viejo Harpagón que, rico y mezquino, vive aterrorizado por que le roben su fortuna. Un punto de partida a través del que Iniesta, de la mano de Molière, quiere recordarnos el lado más mezquino y egoísta del ser humano, los estragos que causan el dinero y el poder, el sexismo o la desigualdad de clases que impera en la actualidad.
La obra de Moliere ejerce una profunda crítica contra la hipocresía burguesa y contra lo peor de la alta sociedad a través de la comedia y la tragicomedia. ‘El Avaro’ es una de las obras maestras de Molière y uno de sus últimos textos.
Comedia basada en ‘Aulularia’ (o ‘La comedia de la Olla’) de Plauto, tiene por protagonista a Harpagón, un rico y mezquino individuo. Este viejo vive aterrorizado por un miedo obsesivo: que le roben el baúl donde ha ocultado su tesoro. Desconfía de todos, incluso de sus hijos…
La trama sucede en París. Los nombres originarios en francés se han cambiado en algunos de los personajes. Leonor (hija del avaro) está enamorada de Froilán, un joven al servicio de su padre como encargado, y Cleanto (hijo de Harpagón) quiere casarse con Belisa, una joven que vive con su madre a punto de ser desahuciadas… por el propio avaro. La obra muestra el lado más mezquino y egoísta del ser humano, donde se lleva al extremo los problemas generados por el dinero y el poder, lo que resulta, lamentablemente de notable actualidad. Al tiempo se percibe el maltrato que Harpagón propina a sus empleados y su exacerbado sexismo.
Atalaya ha conseguido crear un estilo propio que se basa en la energía del actor, tanto a través del cuerpo como de la voz, la lectura contemporánea de los grandes textos universales, la fuerza expresionista de las imágenes y el tratamiento poético del espacio, la música y los objetos. La continuidad de su equipo estable permite largos procesos de investigación para cada montaje.
En 2023 celebrará sus 40 años. En estas cuatro décadas se ha convertido en uno de los referentes más sólidos del teatro español. Sus montajes se han representado en más de medio millar de ciudades y en 180 festivales nacionales e internacionales en 40 países de los seis continentes y ha recibido más de 60 galardones, entre los que destaca el Premio Nacional de Teatro en 2008 y varios internacionales en países de cuatro continentes.
En 2008 puso en marcha el Centro Internacional de Investigación Teatral TNT,reconocido por el Ministerio de Cultura como uno de los tres centros de creación e investigación más significativo del país y ha tomado parte en seis programas culturales de la Unión Europea.